Y finalmente fue la vencida.
Dos veces antes, en 2010 y 2011, los propietarios
del edificio de Montes de Oca 318 habían intentado desactivar su protección
preventiva para poder demolerlo y en cada oportunidad fue ratificada por el
Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales.
Según informábamos hace pocos días, el tercer
intento tuvo origen en el Ejecutivo porteño, que envió a la Legislatura el
proyecto 3641J2012 en el cual protegía decenas de edificios valiosos y
desprotegía otros. Entre estos últimos, el Círculo de Obreros de Santa Lucía.
Afortunadamente, gracias a negociaciones legislativas de
última hora, documentación presentada y una gran cantidad de firmas de vecinos enviadas a los
legisladores, quedó protegido definitivamente en la votación del 2 de octubre.
Ahora bien, esta protección legal no servirá
de mucho si el edificio continúa abierto de par en par y expuesto a los rigores
climáticos deliberadamente por sus propietarios.
Correspondería aplicar la ley 4380 que
establece el régimen de penalidades para la protección del patrimonio cultural
de la Ciudad de Buenos Aires. Esta norma incluye los edificios catalogados y
sanciona con fuertes multas a quien “No
conserve ni proteja adecuadamente los bienes que formen parte del patrimonio
cultural” y “Destruya total o parcialmente bienes integrantes del patrimonio
cultural”.
Hasta puede exigirse a los responsables de los daños “la reparación
de los daños causados o la reconstrucción de los bienes afectados”.
Todo, “de conformidad con lo que establezca
la autoridad competente”. Esa autoridad competente es el Ministerio de Cultura
de GCBA, a cargo del ing. Hernán Lombardi.
¿Aplicará la ley el ministro?
Mientras esperamos que lo haga, el Círculo de
Obreros de Santa Lucía estará a salvo de demoliciones pero no de sus propios
dueños.
------------------------------------------
No hay comentarios:
Publicar un comentario