Casi en tiempo de descuento, el martes se despachó favorablemente en la Comisión de Planeamiento de la Legislatura la prórroga de la ley 3056 por un año más.
Recordemos: esa norma establece que todo edificio construido antes de 1941 está preventivamente protegido y que cualquier pedido de demolición tenga que pasar por el Consejo Asesor de Asuntos Patrimoniales (CAAP), un organismo multipartito que debe establecer si el mismo tiene valor patrimonial o no.
En caso afirmativo, se envía el caso a la Legislatura para comenzar el proceso de catalogación (pasa a integrar el conjunto de edificios protegidos definitivamente). En caso contrario, se autoriza la demolición.
A lo largo de los dos años de vigencia de la ley, el proceso ha despertado polémicas debido a la cantidad de edificios valiosos que se han perdido. No obstante, ha servido para que se evite la demolición de muchos otros.
Y, contra los pronósticos agoreros, no significó una paralización de la industria de la construcción ni mucho menos.
Si hablamos de Barracas, el caso más resonante y reciente ha sido el del Círculo de Obreros de Santa Lucía, en Montes de Oca 318, que fue protegido la semana pasada en virtud de su valor histórico aplicando la ley 3056.
Además, al día de hoy esta ley ha permitido proteger de demoliciones otros 50 edificios valiosos de nuestro barrio.
Sin olvidar que como está planteada es una ley de emergencia en el plazo de la cual el Ejecutivo de la Ciudad debería elaborar el catálogo de edificios protegidos, entendemos que:
- Debería convertirse en un procedimiento de carácter permanente, no transitorio.
- El CAAP debería contar con asignación presupuestaria acorde a la tarea que debe desarrollar, personal rentado, capacidad operativa real.
- Debería sumarse a su composición un miembro que represente a las organizaciones vecinales que actuamos en defensa del patrimonio edificado, la identidad de los barrios y la calidad de vida de los vecinos.
- Debe ponerse en vigencia un régimen de penalidades severas para quien demuela o dañe intencionalmente un edificio protegido.
- Debe existir un sistema de compensaciones e incentivos para los propietarios de los edificios que se protejan.
Todo eso queda para 2011, que está a la vuelta de la esquina.
Hasta entonces…cierto alivio, que no es poco.
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2 comentarios:
un año? sirve para respirar, pero porque sera que no son soluciones sino paliativos? el CAAP es una verguenza ya se denunciaron muchisimas irregularidades e intereses economicos o especulativos
sigue no habiendo una ley de planeamiento y futuro urbano en la ciudad ya que el gobierno y las inmobiliarias siguen currando de esto mientras sea un negocio para ellos !!!!!! por eso esperamos el otro gobierno que fije pautas claras perdurables para siempre verguenza da que en barrios historicos se siga destruyendo la identida patrimonial verguenza un cosmetico mas de este gobierno pro paganda
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